Wednesday, February 13, 2013
SEIS PROPOSICIONES SOBRE HISTORIA REGIONAL QUE DEBEN SER INCORPORADAS EN NUESTRO SER ATACAMEÑO Y EN NUESTRA EDUCACION FORMAL
Desde el año 1999, el Grupo de Estudios de Atacama GEA, y desde 2001 la Sociedad Chilena de Historia y Geografía , se han preocupado en investigar, trabajar y pensar científicamente la historia regional, tanto desde la perspectiva de nuevas investigaciones como desde la teoría, lo que ha derivado en nuevas interpretaciones y tesis sobre nuestra historia y el rol de esta en la conformación del ser nacional. Es necesario si, reconocer que con anterioridad ha esta nueva propuesta, se encuentran los trabajos de Oriel Alvarez, el más acuciosos y prolífico de nuestros historiadores, destaca de su obra: Atacama de Plata y Huasco de Cobre, mencionar las opiniones históricas de Ovidio Aguirre, o bien Copiapó 250 años de Lincoyan Montiel, la investigación Perfil Histórico de Caldera, del Ingeniero e historiador José Villalobos, las contribuciones históricas del Museo Regional de Atacama, especialmente su número 4. Todo ello conforma un estado del arte de esta ciencia en la región.
Pero, a partir del año 1999 en adelante lo que se ha hecho es indagar y descubrir nuevos documentos y con ello generar interpretaciones audaces, documentadas, con una metodología heterodoxa y una epistemología distinta, que buscan situar y pensar Atacama desde la corriente de la historia regional, con el objetivo de crear identidad y sentido de pertenencia. De esta forma también hemos buscado intervenir en la historia de Chile y redibujar su nueva interpretación y periodificacion, dejando atrás el conservadurismo y centralismo de la historiografía clásica chilena, hemos buscado resituarnos en hitos y posteriores procesos de desarrollo donde Atacama es central, una suerte de tiempo eje, parafraseando a Jasper, del acontecer chileno.
Junto con los grandes ejes históricos nacionales también, hay un conjunto de hechos, creaciones e ideas surgidas de la región que conforman un corpus de gran interés histórico. Nos referimos específicamente a la historia prehispánica en el norte de Atacama, trabajada por Carlos González, a hechos como el madero carril de Vallenar a Huasco, el primer Banco nacido en la provincia del Huasco producto de la riqueza minera, etc. Pero, existen a lo menos 6 hitos generadores de importantes procesos históricos de desarrollo que no pueden ser dejados de lado y que necesariamente deben ser incorporados al ser regional y por supuesto al sistema educativo en Atacama, nos referimos a los siguientes:
1. El estudio y análisis de la etnia Diaguita como la más adelantada del universo prehispánico chileno, su proceso de adaptación en resistencia, entre los siglos XVII al XX, y su posterior reaparición durante el siglo XXI. Junto a ello la puesta en valor de la etnia Kolla, como pueblo originario de Atacama.
2. Los Prolegómenos (Invasión de Diego de Almagro 1536), y el Inicio de la Historia en Chile, 26 de octubre de 1540; toma de posesión de Chile en el Valle de Copiapó. Hecho que da base al día de Atacama, y que permite configurar una panorámica del siglo XVI.
3. Descubrimiento de Chañarcillo: La solidificación y puesta en marcha de la República, producto de la plata de Chañarcillo (16 de mayo de 1832). La generación de las grandes fortunas del siglo XIX y consolidación del capitalismo en Chile.
4. Puesta en Marcha del primer ferrocarril chileno y tercer de Sudamérica, industrialización y desarrollo de los transportes en Chile ( abril a diciembre de de 1851)
5. Revolución Constituyente (enero de 1859), el desarrollo del pensamiento regionalista, laico y liberal en Atacama, la figura de Pedro León Gallo, de José Sierra, y todo el movimiento intelectual de Atacama, antecesor de los hechos del 59, con José Joaquín Vallejo y en adelante.
6. La Supervivencia y rescate de los 33 trabajadores mineros de la Mina San José, hecho de la historia del presente, que será una huella en nuestra historia.
Actualmente, la mayor y más avanzada investigación, esta en el Boletín del Museo Regional de Atacama, que contiene desde su primer número del año 2010, parte de las nuevas exploraciones y trabajos sobre historia y patrimonio de la región. Un muy buen aporte también, es el estudio de fortalecimiento de la identidad en Atacama. Que son bases para un mejor conocimiento y comprensión del territorio, pero que lamentablemente no llegan de forma masiva al público y al sistema escolar.
Por estas razones, ahora nos parece una responsabilidad ineludible por parte de los sectores educativos de la región ver como se integra esta parte de nuestra historia y patrimonio en las aulas, si de verdad queremos mejoras y una educación que algunos llaman de calidad. Sobre lo mismo, especial mención, es como este tópico se incorpora en las carreras de ingeniería y tecnología minera, si pensamos hacer a diferencia en cuanto a formar un profesional integral y competitivo. No obstante la incorporación de lo nuestro (historia y patrimonio), que genera más que conocimiento, genera conciencia, debe ser realizado desde la enseñanza inicial, básica, media y como ya dijimos, hasta permear toda la enseñanza superior.
No es posible seguir al día de hoy sin conocer y valorar nuestras raíces, patrimonio e identidad, máxime cuando hoy existe claridad con respecto a lo que hay que hacer. Del correcto tratamiento y difusión de la memoria de Atacama, su historia, de la adecuada y pertinente socialización de su acervo cultural y natural, pensamos puede generarse una corriente dinamizadora real, para el crecimiento, bienestar social, impulso científico y desarrollo integral, de esta nuestra región.
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